lunes, 15 de agosto de 2011

Sobre la Jornada Mundial del fundamentalismo católico


Envueltos en amor al prójimo llegan al Estado español miles de jóvenes católicos de todo el Mundo. La paz por bandera y el amor al orden existente por dogma de fe. Han venido a revitalizar las ideas de opresión que a finales de los años 30 lograron dar a España la "paz eterna", la "luz divina" que frenó al bolchevismo y a la hordas marxistas que conspiraban por el fin de la Europa cristiana.

Nosotrxs, lxs militantes antifascistas, proletarios deudores de aquella "hordas" de la Revolución Social no negaremos la mayor. Nuestro objetivo, como el de nuestros antecesores, es acabar con la explotación del hombre por el hombre, barriendo para tal labor con todas las instituciones y dogmas del podrido mundo burgués.

Hoy la JMJ se revela como una "Cruzada" contra el "materialismo" y para ello firman manifiestos "morales" los bandidos y criminales de la patronal española. Botín y los de la CEOE nos llaman a reencontrarnos con nuestra alma y abandonar la avaricia materialista. ¡Y lo dicen ellos!. Pero no se han equivocado no, los fascsitas y los demócratas burgueses se centran en atacar al materialismo, no en su definición de acumular materiales, sino en su definición filosófica como cosmovisión de la realidad que dota a los oprimidos de su instrumento de análisis, permitiendo dar una explicación material y científica del sistema capitalista y del conjunto de relaciones sociales en las que se entrelaza la humanidad, que se divide en explotadores y explotados.

El antifascismo de clase y revolucionario abandera ese materialismo filosófico que es arma de los oprimidos contra la sofistería, el idealismo y la metafísica burguesas. Y reconoce que la Iglesia católica, como cualquier otra, es una institución al servicio de las clases dominantes que ideológicamente es la defensora de la religión, pero que económica y políticamente actúa como sector parasitario dentro de la democracia burguesa aprovechándose de la dictadura del capital contra las clases proletarias, teniendo intereses económicos en las grandes empresas del IBEX-35, de las Cajas de Ahorro y de numerosos organismos políticos y sociales.

Ayer los curas llevaban bajo palio al fascismo (en España y en Croacia, en Polonia y en Austria...) y lanzaban desde sus pulpitos proclamas para exterminar a lo más avanzado de la clase obrera. Hoy dicen traer amor y tolerancia y, aunque fuese cierto, no sería más que la otra versión de la dictadura del capital, la de la "caridad" que justifica a los burgueses y los convierte en buenos feligreses que se preocupan por su "prójimo" al modo en que lo hacen las ONG´s "ateas" que democráticamente esparcen las migajas de las metrópolis opulentas entre las legiones de famélicos que pueblan el Mundo.

Contra las almas caritativas y su cinismo estamos con Oscar Wilde: "los mejores de entre los pobres no son nunca agradecidos". Contra las instituciones religiosas estamos con la historia de la lucha de clases, con los obreros insurrectos de la Semana trágica de Barcelona, con los militantes proletarios de los años 30 y con tantos otros que lo dieron todo para acabar con la ignominia. Aunque debemos señalar que la única forma posible de estirpar a los parásitos sociales es actuar contra la sociedad misma y su anclaje en la división social del trabajo y el sistema de producción capitalista.

Es la lucha de clases que tanto odian los curas y obispos la única que puede encerrarlos en los libros de historia para liberar al género humano.

Plataforma Antifascista de Zamora.
Agosto de 2011


miércoles, 20 de abril de 2011

EDITORIAL: PAZ SOCIAL, NOS APRIETAN LAS CADENAS

EDITORIAL DEL Nº 10 DE NI UN PASO ATRÁS, ÓRGANO DE DIFUSIÓN Y PROPAGANDA ANTIFASCISTA

La Paz Social por fin ha llegado, pero ¿alguna vez se fue? El tímido “Así no” que encabezó la huelga general de CCOO y UGT fue tan solo un anticipo del nuevo brindis al sol con el que se han deleitado sindicatos, gobierno y patronal. Supuso un guiño insinuante, un luego quedamos, una muestra inequívoca de que los sindicatos oficiales querían tema para poder gemir y gritar “Así sí”. Y vaya si lo han conseguido pues el pacto orgásmico entre Toxo y Zapatero, entre Méndez y Rosell, trae consigo unas más que embarazosas consecuencias para el proletariado del estado español: Trabajar hasta los 67 años; el cálculo de la pensión sobre los 25 últimos años cotizados a la Seguridad Social; la liberalización del negocio del desempleo a través del fomento de las Agencias Privadas de Colocación; las cláusulas de descuelgue de los convenios colectivos legalizando el incumplimiento de los mismos por parte de la patronal; la ampliación de las causas objetivas de despido para así abaratar las indemnizaciones, que en gran parte serán costeadas por el Estado a través del FOGASA…
Todas estas medidas, y las que están por venir (el Contrato de Primer Empleo o el fin del Salario Mínimo Interprofesional), son un ataque directo de las clases dominantes contra la clase obrera. Los burdos argumentos sobre los cuales justifican estos recortes los politicuchos y los autodenominados periodistas, como que vivimos mucho y trabajamos poco, han sido bien esclarecidos y desmentidos por organizaciones como la CNT en diversos documentos (Ver “El falso debate sobre la crisis del sistema de pensiones”). Referenciadas estas justas críticas a las reformas anti-obreras, nosotrxs vamos a centrarnos en algunos de los que por el bien común aprietan nuestras cadenas, los sindicatos.

Ni traidores, ni vendidos, hace décadas que son nuestros enemigos


El principal problema del proletariado en nuestro tiempo es que carece de conciencia revolucionaria y por ello de independencia política y orgánica, las cuales deberá obtener en incesante lucha contra la burguesía y todas sus formas de reproducción sociopolítica. Así, los proletarios arrastramos prejuicios burgueses que nos enajenan la correcta visión de la realidad material en que nos hallamos insertos. Y, por poner un ejemplo, nos conformamos con ver a los sindicatos oficiales como “unos traidores”, como elementos que son “malos” pero que podrían ser “buenos”. Pero para convertirse en traidores, los sindicatos deberían defender los intereses de la clase obrera, y eso hace décadas que es historia marchita del movimiento obrero del Estado español. Como mínimo desde que la Constitución de 1978 sancionó el “Estado social y de derecho” para que los sindicatos se integrasen en el bloque dominante, cogestionando la dictadura de clase de la burguesía y convirtiéndose en nuestros enemigos, en nuestros enemigos de clase.

El sindicato surgió en su día como unión de obreros para defender sus intereses económicos, lastrados ya de inicio por la reforma social: subidas salariales, mejoras sanitarias… mejoras sin duda alguna para los obreros, pero tan solo mejoras dentro de la esclavitud asalariada. Pues el sindicalismo nace como respuesta a la posición objetiva del proletariado dentro del marco de las relaciones de producción capitalista y solo se mueve en los espacios que esa misma posición le deja. El sindicato fue pues la primera herramienta de la clase obrera, pero estaba limitada por su marco económico y social. El movimiento obrero se desarrolla en una lucha constante contra la sociedad capitalista que le ha visto nacer. Y a comienzos del s. XX, superará desde distintos prismas y en diverso grado esta limitación inherente a la lucha económica: el anarcosindicalismo y el consejismo lo harán de forma contradictoria y más coherentemente lo logrará el marxismo-leninismo.

Esto provocará la escisión del movimiento obrero en dos grandes bloques irreconciliables: de un lado los reformistas que mantendrán como eje de sus luchas el sindicalismo y toda reforma política que mejore la situación del proletariado, pero siempre dentro de los márgenes de la legalidad burguesa y, sobretodo, de la producción social capitalista. De otra parte quedarán los revolucionarios que proponen que solo cuando el obrero rompa consigo mismo, es decir, que comprenda que sus intereses de clase pasan por eliminar su subordinación social y que ello solo puede hacerse desde la revolucionariación de las relaciones de producción y la destrucción del poder político y social erigido para mantenerlas, el Estado burgués. Es decir que el obrero no puede contentarse con la reforma que lo mantiene como obrero sometido al patrón sino que debe transformarse, elevarse como clase social, a sujeto y objeto de la Revolución.

Decimos que el m.o. se desarrolla. Pues mediante su experiencia en la lucha de clases contra la burguesía lo que en un primer momento fue su mejor arma, el sindicato, se convierte con el tiempo en su contrario, en arma de la clase capitalista. ¿Por qué decimos esto? Porque cuando el capitalismo avanza se convierte en un sistema económico mundial haciendo que las clases sociales, que las relaciones productivas, transciendan las fronteras nacionales y todo, la lucha de clases, debe ser observado desde el Mundo y no desde el Estado. Bajo estas condiciones nace la aristocracia obrera como sector del proletariado que se aprovecha de la posición de su país en la economía mundial. Esta capa social, difícil de concretar, hace de la reforma social su interés de clase y del sindicato, como vieja forma orgánica de los trabajadores, el mejor vertebrador de estos intereses junto al partido obrero reformista. Es decir que la escisión política de la clase proletaria (reformistas vs revolucionarios) proviene en origen de su división económica entre los obreros asalariados que sufren la dictadura de clase y los obreros bien retribuidos que participan de esta dictadura de la minoría contra la mayoría. Esta última clase utiliza las reformas para apuntalar su posición dentro del imperialismo, no por engaños de las clases dominantes, sino porque su situación es tal que para ella la dictadura de los bancos, de los policías, de los burócratas y de los patronos es realmente el Estado del Bienestar, mientras para la mayoría ese concepto es una broma de mal gusto que significa paro, miseria, explotación y violencia.
Una posición económica de privilegio, una línea de acción política basada en el reformismo y una conciencia imperialista y reaccionaria, tales son las características de la aristocracia obrera. Conciencia que vemos a diario en los informativos, en las universidades, en los centros de trabajo y como no podía ser de otro modo en el cine.

Apocalypse Now narra las hazañas del imperialismo norteamericano en Vietnam y en cierto sentido muestra como el “inocente” bienestar de la Metrópoli es una apisonadora que pasa sobre los pueblos oprimidos del mundo: A un grupo de militares yankees les encanta hacer surf. A su alrededor está la guerra y la muerte que ellos provocan, pero insisten en hacer surf por lo que necesitan construir una campana de cristal en la que disfrutar de un bienestar democrático sin que la realidad les moleste. Y ¿cómo lograr aislarse de lo que les rodea generando esa relajante irrealidad? Bombardeando todas las aldeas alrededor de la zona donde quieren surfear, es decir, que todo les vale para mantener su posición de privilegio y no les importa sobre quien deben pasar. Y esa es la moral imperialista propia de los sindicalistas liberados y toda clase de socialfascitas y chupatintas que parasitan libremente por nuestra sociedad: ellos no se plantean porque pueden surfear, tampoco les interesa. Solo quieren seguir haciéndolo y si para ello son necesarias guerras imperialistas o recortes de derechos pues ellos serán los primeros en utilizar los medios que alegremente la burguesía monopolista pone a su disposición para que se puedan cumplir sus intereses. En Apocalypse Now el pobrecito soldado imperialista utiliza napal para procurarse sus intereses. En las campanas de cristal de la Unión Europea la aristocracia obrera utiliza el corporativismo que desarrollan participando de la dictadura del capital desde sus puestos directivos en Cajas de Ahorro, en firmas de Convenios Colectivos, en los Pactos de Toledo o en los grandes Comités de Empresa.

Frente a estos elementos debemos poner la organización de la clase obrera y su unidad en base a la lucha por sus intereses en un nivel particular (en las luchas económicas) pero supeditado e insertado en un nivel general (la Revolución Social). Y para ello es indispensable señalar a quienes están del otro lado de la barricada, CCOO, UGT, USO…, pues la lucha contra el capital pasa por la lucha contra todas sus organizaciones que encuadran a las masas y las guían hacia el inmovilismo. Y a los primeros que nos encontramos es precisamente, a los sindicatos oficiales, que pretenden llevarnos como ovejas por el Eterno camino del reformismo, que no multiplica panes ni convierte el agua en vino.

miércoles, 9 de marzo de 2011

Comunicado: Esbirros de la burguesía atacan al movimiento obrero en Zamora


El 5 de marzo nazis llegados de diversos puntos del estado español atacaron la sede de CNT-AIT en Zamora. Podían haber reventado la sede del Partido Popular o la del Partido Socialista. Podían haber intentado asaltar las oficinas de la CEOE o la delegación local del ministerio de defensa. O incluso podían haberse atrevido a atacar el local de los demócratas de UPyD, esa organización pseudofascista, que también se ha enfrentado al movimiento obrero zamorano con la denuncia que nos puso a la Plataforma Antifascista durante el 29-S. En definitiva, los fascistas podían haber lanzado sus ataques contra la burguesía, pero ellos no están para eso. Pues al fin y al cabo los nazis solo son la representación más vulgar de la violencia de clase que la burguesía ejerce contra las masas explotadas.

En muchas ocasiones los nazis se presentan como defensores de la clase obrera. Para ello cubren su demagógico discurso bajo la bandera nacionalista española. Poco se diferencian de don Emilio Botín, de don Miguel Ángel Fernández Ordoñez o del señor Pérez Rubalcaba. Todos ellos esconden su violencia de clase bajo una argumentación interclasista que engloba a obreros y patrones con el único objetivo de que los primeros nos arrodillemos, por nuestro bien, ante los segundos, ya sea para acatar una reforma laboral, la militarización de los aeropuertos, unas detenciones en Euskal Herria o la supremacía de no sé qué raza.

El motivo de la congregación de boneheads que se dio el pasado 5 de marzo era la presentación de un libro racista que se apoyaba en las teorías conspiracionistas que tanto gustan a esta gentuza. El gran intelectual que dice haberlo escrito es una auténtica estrella del rock dentro del movimiento fascista español y por ello se trajo a un buen séquito de guardaespaldas para asegurarse que ningún obrero se acercase a él pues es un exitoso empresario que prefiere reunirse con periodicuchos como la opinión de Zamora o el norte de castilla que no dudan en entrevistarlo y hacer propaganda de sus ideas fascistas y racistas. Porque una de las características principales de estos caudillos de la extrema derecha es que son empresarios. Sino que le pregunten al Cojo de Valencia presidente de un partido ultra, de la patronal española de proxenetas y de una empresa de matones a sueldo al estilo de Prosegur, que fue fundada en 1976 por paramilitares y torturadores argentinos, amigos todos ellos de tipos como Mario Conde o los March (banqueros fascistas españoles)

En cuanto a los fascistas locales que hicieron de anfitriones, poco tenemos que añadir a su conocido y patético historial. Unos cuantos niñatos con la lengua demasiado larga, unos pocos ex presidiarios, por tráfico de drogas, y algún que otro intento de guardia civil que no cumplía los más elementales requisitos físicos, vamos que no daba la talla, y fue trágicamente rechazado para defender a su patria.

Esta es la punta de lanza del fascismo local y estatal. Con estos mimbres quieren hacer callar al movimiento obrero en Zamora y en el resto del Estado. Pero el movimiento obrero no teme a sus enemigos, se organiza para acabar con ellos.

Hoy ha sido el local de lxs compañerxs de CNT-AIT, pero mañana los fascistas pueden atacar a cualquier obrero por su militancia consciente, por su origen nacional o simplemente por defender sus derechos laborales.

Desde la Plataforma Antifascista defendimos el día 5 el local de nuestrxs compañerxs. Porque nuestro objetivo siempre será luchar hasta vencer, estrechando lazos entre las organizaciones revolucionarias de la clase proletaria.

Plataforma Antifascista de Zamora

Marzo de 2011



http://www.kaosenlared.net/noticia/comunicado-esbirros-burguesia-atacan-movimiento-obrero-zamora

sábado, 5 de marzo de 2011

Ataque nazi al local de lxs compañerxs de CNT en Zamora


Nazis de distintos puntos del Estado acudieron a Zamora a una charla impartida por un empresario de la extrema derecha (al que le dan coba periódicos de desinformación como El Norte de Castilla). El acto fascista tenía lugar a escasos metros del local de lxs compañerxs de CNT Zamora por lo que desde la Plataforma Antifascista decidimos apoyar a lxs compañerxs en la defensa de posibles agresiones. Así militantes comunistas, anarquistas e independentistas colaboramos en frenar el ataque de entre 30 y 40 fascistas, que como ya hemos dicho, eran en su gran mayoría de fuera de Zamora.

Plataforma Antifascista Zamora


INFORMACIÓN DE LA HAINE:
Los nazis se han acercado a la capital zamorana con la excusa de presentar un libro de carácter racista. Ante este acto, compañerxs de la Plataforma Antifascista de Zamora y de la CNT han acudido al lugar donde se realizaba el acto, para mostrar su disconformidad. Los miembros de extrema derecha han decidido responder en grupo (que se contabilizaba por unos 40) y de manera violenta, atacando a los compañerxs que allí se encontraban. Estos se han visto obligados a rehuir hasta el local de CNT, que se encontraba en las inmediaciones, y desde allí han contenido el ataque.

Por otro lado, un compañero de CNT ha sido atacado cuando caminaba en solitario por la ciudad y se prevé que esta misma noche se pueda repetir otro ataque al local de la CNT o a otrxs compañerxs críticos de la ciudad. Por lo que se están realizando preparativos para poder responder a estas agresiones.

lunes, 21 de febrero de 2011

Las Revueltas Populares se extienden por el Mundo

LAS REVUELTAS SOCIALES EN ÁFRICA

Años llevan conformandose en los países oprimidos del Norte de África movimientos populares contra los gobiernos aliados del imperialismo norteamericano y europeo. Hoy esos movimientos cristalizan en revueltas contra los dictadores amparados por Sarkozy, Zapatero, Merkel, Obama y toda esa caterva de pseudofascistas e imperialistas que tras la falsa careta de la democracia parlamentaria salen ahora a la palestra para mostrar su "solidaridad" con los manifestantes apaleados y asesinados por los esbirros fascistas del capitalismo argelino, libio, egiptio... que tienen a sus semejantes en la Guardia Civil, en los mossos d´ escuadra, en la policía nacional...

Por su parte los medios de comunicación pretenden engañarnos una vez más hablando de las "redes sociales" como motores de estas revueltas, cuando en realidad son las organizaciones obreras y verdaderamente democráticas las que llevan años combatiendo a los títeres del imperialismo. Las cárceles de Marruecos están de llenas de estudiantes comunistas y democráticos así como de revolucionarios saharauis. En Argelia, en Túnez, en Egitpo y demás naciones oprimidas son demócratas nacionalistas e islamistas los que encabezan desde hace décadas estos movimientos anti-imperialistas que pretenden instaurar una democracia acorde con las realidades nacionales y no con los intereses de las burguesías europeas.

El deber de todo trabajador consciente debe ser apoyar estos movimientos, denunciar la demagogia de los medios y de los burócratas de Europa y EEUU, y sobretodo, luchar y organizarse para que los movimientos revolucionarios surgan poderosos aquí para poder acabar con el sistema imperialistas mundial que condena a los proletarios y a los pueblos del mundo a ser eternos esclavos del capital.


MARRUECOS



TÚNEZ



ARGELIA



EGIPTO



BARHÉIN




LA GUERRA POPULAR EN INDIA Y LA CONTINUACIÓN DE LA LUCHA DEL PUEBLO GRIEGO


En la India continúa avanzando la Guerra Popular como forma concreta de la Revolución Proletaria y Campesina que tiene por objetivo destruir el poder burgués en India y construir una República Socialista que permita acabar con el capitalismo y que respete a todas las nacionalidades y etnias que conviven en la India. La Guerra Popular es dirigida por el Partido Comunista de la India (maoísta) y es apoyada por las inmensas masas campesinas que ven como las tierras pasan de manos de los capitalistas a ser de propiedad común. En el Ejército Guerrillero de Liberación Popular están integrados miles de hobres y mujeres revolucionarixs.

En Grecia, a pesar del silencio informativo, se siguen sucediendo numerosas huelgas parciales encabezadas por el PAME (sindicato del KKE, comunistas) contra las medidas "anti-crisis" del PASOK (el partido socialista griego). Así mismo las acciones armadas de grupos revolucionarios, anarquistas en su mayoría, que se intensificaron desde el inicio de los disturbios de 2008, vuelven a repuntar en solidaridad con decenas de anarquistas detenidos por el Estado griego, como es el caso de varios militantes del grupo Conspiración Células de Fuego.

INDIA



GRECIA

miércoles, 9 de febrero de 2011

¡¡¡La vida es lucha!!!

Tomado de Ni Un Paso Atrás Nº 9

La vida está llena de ejemplos. Para lo bueno y para lo malo. Pero no entendamos “lo bueno” y “lo malo” como un problema moralista, no. Entendámoslo como una cuestión de interés social, es decir, como algo ligado a unos intereses sociales, a una clase
social. Y puesto que pertenecemos a la clase obreraobservémoslo conforme a los intereses políticos y sociales de nuestra clase. Porque si nos confinamos a los estrechos márgenes de lahipocresía burguesa que impregna la moral dominante en todas sus formas (la religiosa, la filosófica, la militar…) acabaremos teniendo por “algo malo” la expresión política de la rabia del explotado y por “algo bueno” la defensa policial de las propiedades del banquero. Y esto es así porque la moral dominante es la moral de la clase dominante. El conjunto de actitudes frente a la realidad que la burguesía pretende pasar por “buenas”, por “correctas”, por “aceptables”… son aquellas que le permiten mantener su posición social. “Ser pacífico”, “ser tolerante”, “ser ecologista” o“ser un trabajador eficiente” son modelos a seguir que propaga la moral y la propaganda burguesa para que el obrero asalariado se mantenga firme y libremente en la cadena de producción, más preocupado por cumplir los mandamientos sociales que le vienen impuestos que por romper las cadenas, también impuestas, que le atan al patrón y al Estado.

En la articulación social de estas normas de comportamiento hay varias constantes, pero por escandalosa, la constante de la hipocresía que destacábamos arriba merece especial mención: El trabajador debe ser pacífico y alejarse de la tentación de usar la lucha armada porque el Estado burgués yde derechoes el único legitimado para ejercer la violencia democrática y eliminar a quienes estime oportuno. El trabajador debe ser tolerante y dejar hacer al patrón su reforma laboral y al Papa sus viajes por el mundo porque la burguesía tiene su propio aparato jurídico-policial para decidir que se tolera y que no, ilegalizando organizaciones políticas y expulsando del país a las razas que no merezcan nuestra tolerancia. El trabajador debe ser ecologista y preocuparse por no ensuciar el mundo porque para eso ya están los monopolios del petróleo o la siderurgia que con sus chimeneas humeantes apuntan desafiantes, pero dentro de la legalidad, al cielo y las estrellas. Y por supuesto, el trabajador debe ser productivo, tragar polvo y sudor en su puesto de trabajo, del que debería estar agradecido, porque para vivir sin producir, para ser perezosos y cínicos, ya están los burócratas de las administraciones, los mercenarios de la pasma, los liberados sindicales y la admirada clase empresarial.

Imágenes y palabras

Una imagen vale más que mil palabras. Y la ciencia se ha encargado de demostrarlo, utilizando factores probabilísticos y estadísticos que estudian la cantidad de información que contienen imágenes y palabras. Pero en los tiempos que vivimos esto no tiene mucha importancia. Imágenes y palabras pertenecen a los capitalistas. Las combinan a su gusto en su prensa, en su televisión, en sus webs, en su cine y en su publicidad comercial. En pequeñas dosis o en grandes bombardeos desinformativos. Forman parte de la superestructura social, es decir, que se asientan sobre la estructura de la sociedad basada en la división social del trabajo y la explotación del trabajo ajeno y sirven por ello para su mantenimiento.Son el vehículo de la moral burguesa. Y en ellas suben a sus modelos, a sus ciudadanos tipo, a sus ejemplos “buenos” y “malos” para llevarlos hasta nuestro cerebro que está tan atado como lo está nuestro trabajo.

Ficción y realidad, son utilizadas por los burgueses para hacer pasar a sus figurillas como hombres y para presentarnos a hombres de verdad como figurillas. He aquí una de sus figurillas: el patriota, el hombre de Estado encarnado por Adolfo Suárez. Presentado como bueno buenísimo, como demócrata de toda la vida, comohombre que con su buenhacer y la ayuda de otros cuatro héroes patrios (Fraga, Carrillo, el Rey, Sr. X y poco más) trajo esta maravillosa democracia a España. Un ejemplo del buen “hombre” que siempre actúa en consonancia con los intereses del país, que suelen ser losdel capitalismo dominante. Una figurilla, un paniguado de la burguesía monopolista española que formó desde los años 50 parte del entramado fascista del Estado español y que se quitó la camisa azul cuando las ansias de poder económico de los capitalistas nacionales reclamaron transitar de la dictadura corporativa a la parlamentaria.

Cambian las tornas. Miguel Hernández, poeta revolucionario. Militante comunista, portavoz de los oprimidos que dedicó sus mejores versos a la lucha por la destrucción del capitalismo. ¿En qué lo han convertido de cara al público? En un inocente escritor y demócrata republicano, en un utópico luchador, en un precursor de la actual dictadura burguesa. Y con este hombre han hecho lo que con todos los hombres y mujeres antifascistas de los años 30. Amoldarlos a lo políticamente correcto de nuestros días para extirpar lo que en ellos había de hombres y de mujeres: su lucha revolucionaria, su vida militante contra el capital, su fuerza y su odio contra el fascismo brutal, que era la política burguesa de la época. Hombres y mujeres rebajados a la categoría de figurillas para que formen parte del bastardo teatro de la sociedad existente en donde el que vive, y vive porque lucha para ser libre, es tildado de terrorista o de loco soñador que “ya crecerá”.

Otro ejemplo de figurilla que intentan pasar por hombre: el elemento egoísta e individual hasta rayar la cobardía. El ejemplo de ciudadano medio que nos ofrecen los burgueses de Hollywood. ¡Quien no ha visto la película de El Pianista! Se nos presenta a un polaco, que existió en la realidad, que ve estallar la IIGM desde la tranquilidad de su hogar en Varsovia hasta que es encarcelado en el Guetto. Logra escapar con ayuda y siempre escondido oye desde su refugio la lucha sin tregua entre los nazis y la resistencia polaca y partisana. Hay un momento en que parece que, cansado de todo, el Pianista va a empuñar un arma, pero no. Prefiere salvar el pellejo mientras otros luchan para que el sea libre en un futuro. El Pianista existió hasta que falleció en 2000. Podrá argumentar algún escrupuloso defensor de los DDHH, podrido por la moral burguesa, que el pobre pianista tenía miedo, que sus condiciones concretas, que bla bla bla. Ante esta figurilla, un hombre: Missak Manouchian. Armenio. Emigró a Francia después de que el imperio Turco exterminase a un millón de los suyos siendo él un niño. Ya en el país galo vivió la invasión alemana de la II GM. Missak podía haberse escondido, ya había vivido un genocidio y estaba a miles de km de su hogar. Pero Missak no era una figurilla. Era un revolucionario, un proletario militante del Partido Comunista que participó en la guerrilla urbana de París. Fue fusilado en 1944 por el ejército nazi. A sus espaldas más de 100 bajas causadas al enemigo, la mayoría altos cargos y oficiales de la Wehrmacht. Y como Missak, millones de trabajadores de todo el mundo que no se escondieron de la muerte sino que salieron a su paso para demostrar que estaban vivos, al igual que lo están hoy los insurgentes que combaten a los terroristas de la OTAN en Beirut o Bagdad.

Para nosotros vivir y ser un hombre o una mujer requiereun acto consciente del sujeto. Un proceso de auto-transformación constante, de revolucionarización de la existencia, del que observa las injusticias y decide prestar su vida a acabar con ellas. Aquí reside la vida, en luchar por ella. Y aquí reside la libertad. En tomar decisiones que rompen con la monotonía de la esclavitud asalariada, con la comodidad de la vida que nos ofrece la burguesía en la Metrópoli,y nos llevan a ser algo más que un DNI. Lo demás es existir, pero no vivir. Porque deambular por el mundo intentando que no nos salpiquen las penalidades, escondiéndonos de la historia cuando pasa por nuestra puerta, es individualismo y egoísmo. Y en ello no hay ninguna decisión libre por muy libre que se crea el que nunca ha pensado en conquistar la libertad y se limita a ser un consumidor de la última mierda puesta en el mercado por una discográfica o una empresa vinatera.

Para la clase obrera, La vida es Lucha.

Crónica de una jornada de Huelga General (una huelga negociada)

Tomado de Ni Un Paso Atrás Nº 9

El pasado 29 de septiembre asistimos a un nuevo fiasco del sindicalismo en general y del de CCOO y UGT en particular. No vamos a hacer un balance cuantitativo de la movilización, es lo mismo el 70% de participación que dan los sindicatos o el 7% que dan los medios herramientas, no lo olvidemos, de la patronal que los controla.

El problema es cualitativo, las dos corrientes sindicales mayoritarias han hecho una huelga pensando en sus intereses particulares y no en respuesta a la pérdida de derechos de lxs trabajadorxs o a la situación económica. Frente a la respuesta sindical en algunos estados, el mejor ejemplo es el del estado francés, nos encontramos en el estado español a dos sindicatos que son meros apéndices del socioliberalismo que se apoltrona en el poder, incapaz de elaborar un mensaje de fondo que aminore los efectos de la crisis sobre la clase obrera.

No tienen más respuesta sindical que el ir a salto de mata, pactando los reducciones en derechos de los trabajadores, esperar las subvenciones y confiar en que todo siga igual o más bien que no se hunda todo con ellos debajo, conservando su parcela de poder. Frente a esta clase de sindicatos se encuentra una patronal que tiene muy clara su hoja de ruta, que pasa por la gratuidad del despido, la liberalización total del mercado de trabajo y por la eliminación de la intermediación sindical.

Lxs trabajadorxs sólo puede desmovilizarse en el peor de los casos o buscar otras referencias sindicales que, salvo escasas corrientes sindicales muy localizadas, no existen, o tomar como referente sindical un sindicato histórico, como CNT, ante la papeleta que presenta ser partícipe de las decisiones de unos sindicatos mayoritarios que no quieren cumplir con sus obligaciones, que se han ganado a pulso el desprestigio general, aunque es cierto que también ha sido alimentado por algunos medios de desinformación, herramientas de la patronal y de la derecha más reaccionaria.

Hay que recortar a los que aspiran de cualquier sindicato debe ser la defensa de los interés de los y las trabajadores y el derecho a defender esos intereses se gana en la calle, no en los despachos pactando con la patronal.

Respecto a la movilización en Zamora poca a destacar. Los sindicatos mayoritarios cumplieron con su objetivo romero y desfilaron por Santa Clara abajo, como si eso fuera suficiente. Para quienes nos movimos todo el día por la calle queda el descrédito que los sindicatos mayoritarios tienen ante cantidad de trabajadorxs, estén o no concienciados de la necesidad de la lucha organizada. Las preguntas más escuchadas eran ¿Por qué han tardado 3 meses en convocar una huelga? O ¿por qué no cuentan para ellxs lxs paradxs? Respuestas que están en la génesis de este escrito. Además asistimos al cierre testimonial de establecimientos la mañana del 29S, testimonial debido al escaso número de piquetes informativos, algo de lo que deberían tomar nota los sindicatos, incapaces por lo que se ve de cerrar filas en torno a una movilización de huelga general.

Pero ya que lo piensen para lo próxima movilización, sin duda necesaria y objetiva teniendo en cuentas las condiciones en las que nos encontramos, que son las mismas, sino peores de las que nos encontrábamos antes. Sin embargo no parece que se esté preparando una nueva jornada de huelga general, fruto del desencanto que causó la del pasado 29 S, mal organizada y peor explicada.

El porqué de la desmovilización general de lxs trabajadores es lo que tienen que analizar y corregir sino quieren ser a corto plazo meras trabas, una más para lxs trabajadorxs huérfanos de un sindicato de clase que tome la calle.